La comunidad desalojó de sus cargos a la Ministra
Lafuente y el Rector Froilán, tildados de autoritarios y corruptos.
Análogamente, la gente también se habría
movilizado en el caso de Mabel Causarano, pero para impedir su destitución dispuesta
por Cartes, ya que gozaba de fama de profesional buena y ética.
La gente la habría defendido, si hubiese considerado
democrática y transparente la gestión realizada a partir de su designación como
Ministra de Cultura. Pero a ella nunca le sobraron recursos para el pueblo.
¿Por qué? Porque intentando quedar bien con el poder de turno, Causarano
adjudicó los recursos de la Secretaría Nacional de Cultura (SNC) a los que
consideraba amigos de ese poder.
Es posible que nadie se lo haya pedido, pero ella se adelantó generosamente,
para conquistar la confianza del Presidente y su entorno, que la cuestionaba por
ser de signo partidario diferente al del gobierno.
Un triste ejemplo
¿Recuerdan que Causarno le solventó un
viaje a Estados Unidos al autor de un “poemario
plagado de errores gramaticales”? (Fuente: http://www.abc.com.py/nacionales/causarano-cesar-no-es-representante-de-paraguay-1265115.html).
Ejerciendo su legítimo derecho a la búsqueda de
oportunidades, este joven poeta en formación había ido al Palacio de Gobierno
para pedirle apoyo al Presidente. Allí, algún funcionario le explicó que el
Presidente no atendía ese tipo de cuestiones, porque para apoyar la cultura estaba
la SNC.
Entonces, fue a la SNC. Ingenuamente, doña Mabel
imaginó que se trataba de una orden superior, sin verificar jamás si era así
realmente.
Un ejemplo patético
La SNC llamó a concurso de Productoras artísticas para representar
artistas y compañías artísticas ante MICSUR (Mercado de Industrias Culturales del Sur) a realizarse en Bogotá en octubre.
Las Productoras que seleccionó la SNC, pertenecen a altxs funcionarixs
de organismos públicos. En contrapartida, descalificó Productoras como Fundación
Lambaré, ganadora del Concurso de los Pueblos.
Fundación Lambaré representa una selección única en su tipo de
artistas. Reúne a lxs más representativos de cada género. Entre ellxs se encuentran
el Ballet Clásico y Moderno Municipal de Asunción, dirigido por el maestro
Miguel Bonnin, y la Orquesta Sinfónica del Congreso Nacional del Para gya
dirigida por el maestro Diego Sánchez Haase.
El proceso de selección de la SNC careció de transparencia, y jamás
publicó a qué artistas representan esas Productoras que premió.
Corolario
Doña Mabel quiso ser buena con lxs poderosxs hasta afianzarse,
para después ser buena con los demás. Pero nunca llegó el momento del pueblo.
Innumerables colectivos culturales de la sociedad le ofrecieron colaboración.
Pero ella les pidió que esperasen. Mientras, se dedicó el monumentalismo … antipopular.
Algunos locales equipados por la SNC, terminaron siendo utilizados
para reuniones partidarias. Y nunca llegó el momento de la cultura de verdad, que
sin duda habría respaldado, protegido e impedido que osasen expulsar a la
Ministra.
Finalmente, el poder terminó perdiéndole el respeto, y la comunidad
– desunida por la discriminación - dejándola de querer y hasta odiándola en
algunos casos. En la vida hay que ser justx y dar a cada quien lo que merece.
Ella se prestó a que la usasen. Así,
fue usada, y descartada cuando dejó de servir. Tal vez pensó que los buenos la
comprenderían y seguirían. Pero nadie la siguió, ni hubo chapulín – colorado o
no - que la defendiera.
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